3 vs 3 para la final de la NBA

Ayer el big three ganó en el campo de los Pistons en un partido muy igualado, dejando claro que Boston tiene tres opciones a la hora de tirar del carro. No estuvo bien KG, pero Ray Allen resucitó en el comento más importante. Una pena para los Pistons, un equipo al que le he cogido cariño en estos playoffs. La definición del juego colectivo no ha podido con el talento verde.

Así que la final está servida, un tres contra tres que enfrenta a dos equipos míticos. El duelo final soñado por la liga, las tvs yankies y muchos aficionados.
Analicemos a las seis estrellas de la final:



KG: Se le critica mucho que en los momentos importantes desaparezca del partido, pero Garnett pasa del tema. Uno de los PF más completos de la historia. Penetra, tira, reparte juego.
Paul Pierce: Mi Celtic favorito. El pobre ha aguantado toda su vida en unos Boston perdedores y ahora está aprovechando la oportunidad. Solo hay que escuchar lo que opina King James de el, poniéndole entre sus favoritos.
Ray Allen: Tirador clásico, su mecánica es una de las más bonitas de la liga. Perdido en sus problemas durante los playoffs (dicen que su madre está en el programa de protección de testigos), parece que los dos últimos partidos nos han traído de vuelta al gran Ray.



Kobe Bryant: Si los Celtics tienen a tres que deciden partidos, los Lakers tienen a Kobe. Uno de los mejores jugadores de todos los tiempos, si Bryant está en la cancha puede anotar de la forma que menos te lo esperas. Lo tiene todo.
Lamar Odom: El Pippen para Kobe. Todo terreno que ataca, defiende, pilla rebotes, anota...
Pau Gasol: Va mejorando en el aspecto defensivo, aunque sigue sin saltar a por muchos rebotes se le vio sólido contra Duncan. El pivot que mejor entiende el juego, suple su aparente fragilidad física con sus buenas lecturas tácticas.


Tan igualados que puede que la cosa la decidan los suplentes y los bases, aspecto en el que ganan por goleada los Lakers. Fisher le da mil vueltas al inocentón Rondo y el banquillo es mucho más profundo en los Angelinos.

Veremos que pasa.